Casa Turire

Casa Turire recuerda el gracioso encanto de una casa de plantación colonial. Ubicada a menos de 2 horas al este de San José, en el corazón de la verde región agrícola de Turrialba, esta hermosa finca está rodeada por el lago Angostura con la imponente presencia de las montañas formando un dramático telón de fondo. Se encuentra a 8,5 km de la ciudad de Turrialba, cerca de la granja Atirro. Este encantador hotel ofrece 12 habitaciones estándar regulares, tres suites y una suite principal.

Todas las habitaciones cuentan con teléfono directo, caja de seguridad, secador de pelo, televisión vía satélite, ventiladores de techo y un balcón privado con una vista impresionante. También hay habitaciones para huéspedes con necesidades especiales disponibles. Las suites tienen una cama King size, un sofá cama, un área cómoda para compartir, mini-bar, TV de pantalla plana, reproductor de DVD, aire acondicionado, jacuzzi y baño de hidromasaje.

La hermosa Master Suite, perfecta para recién casados ??o familias, es una habitación de dos pisos: el primer piso tiene una sala de estar, un baño con ducha, un sofá cama, una sala de televisión con una vista panorámica de la entrada del hotel; en el segundo piso, la habitación principal tiene una cama King size, jacuzzi, baño, balcón, minibar, aire acondicionado, TV de pantalla plana y reproductor de DVD.

El hotel ofrece un restaurante gourmet con comida típica costarricense e internacional, un bar de estilo inglés, una piscina exterior y jacuzzi, sala de juegos y lectura con TV, servicio de lavandería, servicio a las habitaciones, senderos, conexión inalámbrica a internet gratuita y salas de reuniones. . Además, el hotel cuenta con 12 hectáreas de reforestación y una granja que produce algunas de las frutas y verduras utilizadas en la cocina del restaurante.

Para los amantes de las aves, Casa Turire es un lugar de observación de aves muy especial. Hasta el momento, se han registrado más de 180 especies en el área del hotel: la encantadora Cotinga, el Tyrannulet de cejas rufas, el mirlo de pecho rojo, el ruiseñor tropical e incluso el hermoso quetzal resplandeciente, por nombrar algunos.